La polémica de cuatro años por la tarifa cero no termina con el fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación a favor de un amparo presentado por Telcel en contra de una legislación que lo obligaba a no cobrar por la terminación de las llamadas de los usuarios de AT&T y Movistar en sus redes, pero sí a pagarle a ellos cuando ocurriera lo opuesto, una acción identificada en la industria como la “tarifa cero” de interconexión.
De inmediato, los dos principales competidores de Telcel fijaron su postura sobre la decisión del máximo tribunal de justicia en México:
“Ante un fallo adverso para el futuro y la estabilidad de las empresas de telecomunicaciones de menor escala en el país, surge la pregunta de cómo las autoridades buscarán equilibrar la posición competitiva de las empresas que resultan severamente perjudicadas con esta determinación para que éstas puedan seguir brindando sus servicios a los usuarios con calidad y productos innovadores”, dijo Movistar en un comunicado.
“Trabajar por el desarrollo de un mercado con competencia efectiva, innovación y más y mejores opciones para el consumidor, continuará siendo nuestra prioridad. Confiamos en el liderazgo del IFT, quien velará que se respete el espíritu de la reforma en beneficio de todos los mexicanos”, escribió AT&T en un tono más mesurado al respecto de la sentencia de la Corte.
Ya desde semanas atrás, cámaras industriales, consultoras y recientemente políticos, editoriales de medios de comunicación especializados y opinadores se habían montado en un tren de persuasión con destino en la Suprema Corte para que los cinco ministros de la Segunda Sala cambiaran de opinión con respecto del amparo 1100/2015 de Radiomóvil Dipsa en contra del Inciso A del artículo 131 de la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión (LFTR).
Opiniones en prensa han calificado a la decisión de la Corte como “un desmantelamiento” de la reforma de telecomunicaciones, que se irá “al traste” con ella; y otras han aventurado que el siguiente paso de las empresas del magnate Carlos Slim será aquel de ir en contra de la eliminación de la larga distancia, ocurrida en 2015, lo que significaría un golpe a los paquetes de servicios de los usuarios; el encarecimiento de la telefonía celular y fija en México.
Tales afirmaciones, sin embargo, no son del todo precisas, según especialistas consultados sobre este particular y la misma sentencia de la Suprema Corte.
Difícilmente habrá una escalada de precios de los servicios móviles y no existe el sentido de conveniencia para que América Móvil también batalle contra la desaparición de la larga distancia, pues aquella es una obligación para todas las empresas de telecomunicaciones y Telmex, por ejemplo, ya levanta más recursos vía sus negocios de datos, es decir Prodigy, que por minutos de voz.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación definió hoy en su sentencia sobre el amparo 1100/2015 que será el IFT quien diseñará las nuevas tarifas de interconexión que deberá cobrar Telcel a sus competidores, que podrán ser de cero o más pesos, pero siempre que no afecte a los consumidores y con base en estudios de mercado, tal como marca el Artículo 137 de la Ley telecom.
“Todos aquellos concesionarios que suscribieron acuerdos o convenios de interconexión celebrados con Telcel no serán constreñidos con el objetivo de afectar a los usuarios… Las tarifas que determine el IFT entrarán en vigor el 1 de enero del 2018 y deberán publicarse en el Diario Oficial de la Federación, en términos de lo dispuesto en el Artículo 137 de la LFTR”, sentenció la Suprema Corte este miércoles por la tarde.
La competencia de Telcel afirma que se correrá el riesgo de que las inversiones huyan de México y por otro lado, que AT&T, como empresa de origen estadounidense y en el marco de la renegociación del TLCAN, fuerce al gobierno mexicano a obligar al IFT a mantener las tarifas de interconexión en cero pesos.
Se ha afirmado además que AT&T llegó a México con la esperanza de que el país ofrecería continuamente garantías a la inversión y un resultado a favor de Telcel con su amparo contra el artículo 131 de la LFTR perjudicaría la imagen del mercado mexicano ante AT&T y el mundo.
Información obtenida del economista
Gerente Comercial