El mercado total disponible potencial para el IoT ascenderá a más de 280 mil millones de dólares en 2019.
A estas alturas son pocos los que, de una manera u otra, están familiarizados con el término IoT. Pero, ¿y a cerca del IIoT? En la industria, un sector que avanza y cambia a pasos agigantados, entra en escena un nuevo término: el Internet Industrial de las Cosas (Industrial Internet of Things, en inglés). El objetivo de esta tecnología es conseguir una mayor optimización de la eficacia operativa y la producción industrial. Es decir, hacer la producción manufacturera más flexible, rentable y sensible a los cambios que pide el mercado.
El IIoT permite reducir el tiempo de inactividad de las máquinas y conseguir que los sistemas estén 100% disponibles. ¿Cómo? Manteniendo los principios que conocemos del Internet of Things: conectando las máquinas a Internet, lo que permite una monitorización remota de los datos que cada dispositivo ofrece, entrando en juego términos como el Cloud Computing o el Big Data. Un sistema que permite a las empresas valerse del mantenimiento predictivo, una técnica utilizada para pronosticar los fallos de la maquinaria y reducir así costos de mantenimiento, mejorar la eficiencia y la disponibilidad.
Ante este panorama, ARC Advisory Group realizó un informe que pretendía responder a la pregunta de ‘¿cuántos dispositivos de automatización industrial están y estarán disponibles para su incorporación al IIoT? Para ello, tomó como base los 30 años del organismo cuantificando el mercado de los dispositivos de control industrial, tomando como base la cantidad de dispositivos instalados y vendidos que potencialmente podrán conectarse al IIoT (excluyendo los dispositivos finales conectados, como los automóviles, los motores de reacción o los aparatos de televisión). ¿La conclusión? Según palabras del vicepresidente de ARC, Chantal Polsonetti: “El mercado total disponible potencial para el IIoT ascenderá a más de 280 mil millones de dólares en 2019. Estas cifras representan el valor de dispositivos que se pueden conectar en la manufactura y tienen el potencial de ser incluidos en las aplicaciones del IIoT”.
¿Y cuál es la diferencia con el IoT? Para Bill Morelli, director asociado en IHS Tecnologías de la Información y Telecomunicaciones de M2M y la Internet de las Cosas: “La principal diferencia es que, cuando los consumidores de IoT a menudo se centran en la conveniencia para los consumidores individuales, la IoT Industrial se centra en gran medida a la mejora de la eficiencia, la seguridad y la productividad de las operaciones con un enfoque en la rentabilidad de la inversión”. Lo que sí tienen en común es que cualquier sector puede hacer uso de ambas tecnologías para conseguir beneficios en sus negocios.