Dios es el socio principal para un negocio prospero.
Padre yo te busco como el socio principal en este negocio. Yo sólo administro lo que es este negocio y yo sé que todo lo que sea necesario para su éxito, tú lo harás.
En todo momento yo soy guiado por la sabiduría divina para ver y hacer todo lo que es correcto. Yo soy provisto con dinero suficiente para el progreso y éxito de este negocio. Todos los canales y medios están ahora abiertos y receptivos para que la prosperidad, abundancia y éxito vengan a este negocio.
Yo ahora declaro y acepto que todos los contactos correctos son establecidos, así como las influencias y actividades están siendo puestas en movimiento para el éxito de este negocio, porque Dios, el socio principal, sabe qué hacer y cómo hacer para que todo funcione de acuerdo al plan divino que tiene para este su negocio.
El universo entero responde a mi creencia, a mis palabras de fe; y los resultados son correctos y precisos. La guía divina me pone en contacto con las personas perfectas, expresando palabras correctas en el momento correcto.
Todos los que laboramos en este negocio, lo hacemos con amor, amabilidad, y damos un buen servicio. Las personas vienen y salen contentas y felices de haber estado en este negocio. Se convierte en un negocio prospero.
Con Dios como socio en el negocio, el éxito y la prosperidad están asegurados. Yo disfruto esta verdad, la creo y la acepto con gratitud, sabiendo que así es. Amen.
Bajo la gracia y en armonía perfecta para todo el mundo, decidí que mi socio sea Dios .
Me parece muy buen decreto y lo voy a aplicar también .
Saludos y Gracias